Segundo Intento



La familia al completo, Escocia, 2011





Después de una ausencia de dos años y medio intentaré volver a publicar mis andaduras por el territorio de la crianza en solitario.

Para que el lapso de tiempo no haga incomprensibles e inconsistentes las historias publicadas a partir de ahora, pues hago un breve resumen por orden aleatoria de los acontecimientos de estos últimos dos años y medios:

1. El bebé ya no es un bebé, es un niño de 3 años, así que a partir de ahora me referiré a él como el niño

2. La niña ya nos es una niña, es una pre-adolescente de casi 6 años con vida social propia, pero seguiré refiriéndome a ella como la niña, más faltaría…

3. Ya no vivimos en un ático de una habitación en la 7ª planta de un edificio sin ascensor, pero en un piso con 5 habitaciones (incluyendo juguetes e invitados) en la 2ª planta de una casa sin ascensor.

4. Los niños han cambiado de escuela, no por el cambio de domicilio pero por las convicciones educativas de la madre. Mala suerte que les haya pillado todos los recortes presupuestarios en educación. Dudo se ha sido una buena decisión ???

5. La madre ha cumplido 40 años y no lo lleva bien

6. Los abuelos siguen viviendo lejos

7. En el 38 aniversario de la madre, la familia (papá y niños) le ofreció una panificadora y ella se ha obsesionada con ser panadera (sin éxito)

8. El papá se quiere comprar un coche

9. El tiempo diario sigue sin ser suficiente para hacer todo lo que hace falta hacer diariamente.

10. El papá se enferma menos, pero siempre escoge para enfermarse el día en que la madre tampoco se encuentra bien. La mama duda que sea una coincidencia.

11. Las princesas poco a poco se han instalado en la casa (a pesar de la resistencia materna), y con Buzz Lightyear, Woody y Lightning Macqueen hacemos una grande familia.

12. Hemos ido a Disney 3 veces y la inicial desaprobación maternal se ha transformado en complicidad absoluta al ver Peter Pan y Wendy.

13. Se ha acentuado el hecho de que cada uno habla en un idioma diferente y no nos entendemos.

14. Poco antes de retomar el blog, la mama retomó el gimnasio

15. La abuela japonesa nos ha regalado una tele, después de más de 5 años llamando televisión al Mac para que los niños no se sintiesen diferentes de los demás.

Creo que por ahora me quedo por aquí…

 

Aprendiendo del miedo

El miedo ha entrado en la vida de la niña. Poco a poco y sin pedir permiso fue ganando espacio y ahora es miembro activo de la familia. Esconde sus garras bajo una música más estridente, una mirada delirante o unos movimientos bruscos. Es amigo de las sombras, de la oscuridad y del “malo” del cuento.

Mientas que hasta ahora la niña disfrutaba de cualquier ida al teatro, ahora se encoje en su silla, cierra los ojos o hace cara de disgusto y pide para ir a casa según que escena o personaje (yo sigo escogiendo las obras con el mismo cuidado que antes, o sea, que por esa razón no es).

La última vez nos pasó con el “Mundo mágico de OZ” y mira que había color, canciones y vestidos de princesas...pero claro también había la bruja del oeste, y Dorothy estaba triste y lloraba detrás de unas rejas... bueno, tampoco del Mago de Oz se puede decir que fuera muy entrañable.

Mi primera reacción fue llevar la niña a casa pero papá insistió que nos quedáramos hasta al final, ni que solo fuera por el bebe, que al no haber todavía incorporado el miedo a su vida, aplaudía con entusiasmo.

Bueno, en realidad quiso quedarse para que la niña aprendiera del miedo, que unas veces más, otras veces menos hará parte de su vida, que al final, en última instancia, es lo que nos hace sobrevivir.

A disgusto mío... y incentivado por el papá (en nuestra casa el imaginario popular japonés substituyo el “cuco” de toda la vida.), el miedo entró por primera vez en nuestra casa bajo el nombre de “Goro Goro”, el dios de los truenos que es amigo del sol y de la luna (según la imaginación de la niña) y otro día unas pegadas de tierra a la entrada de la puerta revelaran, para mi sorpresa, la presencia de “Makurokurosuke” (espíritus que parecen unas bolitas negras de carbón). A partir de entonces yo iba con la fregona arriba y abajo quitando cualquier granito de polvo que pudiera indicar la llegada del susodicho espíritu.

Pero de acérrima defensora de que no hay que asustar los niños, poco a poco, fue cuestionando, indagando, reflexionando, cediendo…y un día encontré algo que en algunas líneas, decía de una manera clara y inequívoca, lo que el papá llevaba tiempo intentando explicarme:

“Las familias tienen el derecho a alimentar los miedos de los niños. Los miedos nos enseñan a vivir con el “no”. Son los limites del “no” que nos protegen de transformar nuestras vidas en una búsqueda insaciable y ávida de limites. El miedo protégenos del desconocido sin fin. Y siempre que nos atrevemos a mirarlo de frente nos conocemos un poco más.” Eduardo Sá en “Más maneiras de sermos bons pais”, 2003.

Para rematar, importa referir que al final de la obra de OZ, la niña, a la salida del teatro y bajo la luz del día, tímidamente, fue a saludar la bruja del oeste. Bueno también ha aparecido con un tarjetón con el autógrafo de Dorothy…

El festival de las niñas

Este año volvimos a sacar del armario la pareja de principes japonesa, simbolo del festival Hinamatsuri.

Una semana antes del dia internacional de la mujer, en Japón se celebra el festival de las niñas. En las casas se hacen pequeños altares donde se coloca la pareja de principes para atraer felicidad y salud a las más pequeñas de la casa.

En realidad a mi me encantan las festividades, celebraciones y otras fiestas afines, pero no puedo dejar de lamentar que incluso en la mejor tradición haya siempre un detalle que tenga que ser mejorado.

Hinamatsuri significa literalmente festival de las muñecas, o sea que a las niñas, desde una temprana edad ya se les reserva indirectamente un rol más decorativo en la sociedad. Y tampoco puedo dejar pasar inadvertido que mientras el dia de las niñas es un dia de calendario normal y corriente, el dia de los niños es festivo. Ya empezamos con las diferencias, protagonismos y otros sentimientos afines...

Ya Amélie Nothomb se lamentaba de estas sutiles diferencias en su libro “Metafisica de los tubos”, una fantastica y delirante autobiografia que relata la vida de la escritora de los 0 a los 3 años. Quizas llegados a este punto sea importante referir que Amélie, aunque de padres belgas es hija de tierras japonesas y a la edad de 2 años y medio ha decidido que seria japonesa.

Pero olvidando estos detalles, este año lo hemos celebrado devidamente. Juntamente con otras 3 parejas fieles representantes de la generación canguro y nuestras respectivas primogenitas, disfrutamos de una deliciosa comida japonesa teniendo como guardianes a “Odairi-sama” y “Ohina-sama”.

Amélie Nothom es una de mis escritoras favoritas, por ser una enamorada de Japón y por contarlo de una manera tan ácida.

“Me respondieran que la carpa era el símbolo de los chicos y que se enarbolaba ese tipo de esfigie piscícola en los hogares de aquellas familias que tuvieran un hijo de sexo masculino. ¿Y cuando cae el mes de las chicas? No existe... Es cierto que ya había observado la existencia de una diferencia sexual, pero eso nunca me había perturbado...Por primera vez, sospeché que se trataba de algo mucho más importante.” Amélie Nothomb, Metafisica de los tubos, 2000

La energia de las semillas

Esta es la última entrega de la trilogía “Los primeros sólidos”.
Después de “Papillas al poder” y “El engaño de los guisantes” llega lo que sería la revelación del ingrediente secreto para hacer las papillas del bebe lo más nutriente posible, las semillas de sésamo.

Ha sido muy difícil incorporar este elemento a las papillas, ya que hay que añadirlo tostado y en polvo y en nuestros países, el molinillo de sésamo es un objeto de lujo: caro y difícil de encontrar.

Menos mal que cuento con una abuela japonesa, pues en el país del sol naciente, el susodicho molinillo es un objeto cuotidiano.

Así, en la última caja sorpresa que hemos recibido, además de miles braguitas y zapatos de Hello Kitty, y de un sorprendente casco de samurai en miniatura llamado Kabuto (que definitivamente merece su protagonismo en una historia a parte), me llegó el ansiado molinillo de sésamo.

Ahora si, cada papilla puede llevar su respectiva cucharadita de sésamo recien molido. Y para facilitarme un poquito más la vida he comprado semillas de sésamo ya tostadas aunque seguramente la autora de mi libro-guía no lo aprobaría.

Horas Extras

Desde que hay los niños, mi vida parece saltar de cuento en cuento y incluso hay algunos personajes animados que me persiguen. En las últimas semanas me acompaña el conejo de Alicia, lo veo en la ducha, en la parada del bus, en la cola del mercado, con su reloj gigante, es tarde, es tarde, es tarde....

Si, últimamente vivo en un retraso continuo. Los libros de la biblioteca hace 3 días que debería haberlos entregado, no solo no lo hice como incluso no terminé de leerlos. Ya he desistido del club de video, con las multas que tenía que pagar por entregar las películas tarde, cada DVD me salía en media a unos 15 euros, o sea, lo mismo que 1 Kg. de guisantes frescos.

La colada, después de seca, tarda en media 3 días en llegar a los cajones, incluso hay veces que no llega. Y llevo 4 meses pagando facturas de electricidad basadas en lecturas estimadas porque nunca llego a tiempo de pasar la lectura real. Y el periodico del Domingo lo colecciono sin llegar a leerlo.

Ahora en mi trabajo se pueden comprar días de vacaciones , lo que me parece una muy buena idea, así que señor Dios, haga también el favor de decirnos donde podemos comprar unas horas extras, a mi ya me bastaría con unas 3 horas más al día.

Y bueno, mientras no me llega la respuesta he decidido invitar a los abuelos de aquí al lado a pasar unos días con nosotros.

Por cierto, parece ser que el bebe se ha apoderado definitivamente de la cama de matrimonio y la niña se ha trasladado al sofá con el papá, así que la pregunta es ¿Dónde van a dormir los abuelos?

Por supuesto que es un fotograma de la Alicia de Tim Burton que se estrenará en España el 16 de Abril. http://www.disney.es/FilmesDisney/alicia/

Enfermedades y otros males

Lo peor que puede pasar a la generación canguro es que uno de los integrantes de la familia se quede enfermito. Las rutinas cuotidianas milimétricamente y milagrosamente organizadas, rápidamente son substituidas por un estresante caos diario de desencuentros, cansancio y discusiones.

Pues esta semana hemos vivido con papa y bebe enfermos. El papa con estas curiosas enfermedades masculinas que aparecen de repente y lo imposibilitan de salir de la cama, aunque no hayan síntomas visibles y medibles, sin ser algunos gemidos y una mirada suplicante. El bebe con vómitos y diarreas sin causa conocida, aunque mama desconfía que sea debido al disgusto de verse repentinamente y sin aviso previo, sin mama a su lado durante todo el día. Ahora mama sale a las 8.30 por la mañana y vuelve al hogar familiar alrededor de las 18.30. Y además de estar trabajando todo el día, al llegar a casa tiene el panorama desolador de un bebe mocoso lloriqueando, una niña habladora y sedienta de atención y un papa inutilizado y con aire sufridor.

El pasado Martes fue al epicentro del caos, me levanté a las 5.30 y me he acostado a las 11.00 por la noche sin haber hecho una sola pausa. Son estos los momentos en que más lamento haber decidido vivir lejos de la familia y echo de menos la mano amiga y acogedora de unos abuelos cercanos.

Hoy finalmente papa fue al medico y el diagnostico fue virus de guardería. ¿De que guardería y de que virus me están hablando? ¿Es una broma? ¿Y porque a la mama ningún medico diagnostica un virus de guardería para que ella también pueda quedarse en la cama?

Si, porque mama solo para cuando tiene + de 39º de fiebre, porque hasta ese momento sigue cumpliendo con sus tareas en la casa, sigue dando de mamar por la noche y sigue preparando los desayunos por las mañanas, sigue siendo la primera en levantarse y la última en apagar las luces.

Si, porque a la mama no la dotaran con estos interruptores que permiten al papa desconectarse y olvidarse de todo sin un único resentimiento o sentimiento de culpabilidad.

Si, porque a la mama nunca nadie le ha dicho que se ella lo hace, se ella se abandona a su enfermedad, la casa aunque se hunda en el caos, no deja de existir...y la familia seguirá estando ahí cuando ella despierte por la mañana para darle los buenos días.

Pues, desde aquí, desde este pequeño rincón os animo a que al menos una vez en la vida lo probéis. Y después, al constatar que no ha pasado nada, seguramente ya os sentiréis más libres y con confianza para volver a hacerlo muchas más veces...Ánimos...

Copos de Nieve

Nieva en Barcelona. Nieva en nuestra terraza.

Además de las vistas al mar, ya tenemos una razón más para vivir en un 7º sin ascensor.
Ya lo sé. Lo podíamos haber hecho más fácil. Además, sin calefacción, o sea, que el bebe y la niña están hechos dos cubitos de hielo.

Hoy sin que dormimos todos en la misma habitación. Juntos contra el frío, la nieve, los piratas, la cama voladora y el Kaminara-Sama (más conocido por Goro Goro). Sobre este último personaje, ya hablaremos en otro momento. ¡Buenas Noches!